[vc_row][vc_column][vc_custom_heading text=»Descubre esta semana en el MOTORCONSEJO lo que debes saber sobre las pastillas de freno.» font_container=»tag:h2|text_align:left|color:%23f9d800″ google_fonts=»font_family:Oswald%3A300%2Cregular%2C700|font_style:400%20regular%3A400%3Anormal»][vc_column_text]¿POR QUÉ SON IMPORTANTES LAS PASTILLAS DE FRENO?
Las pastillas juegan un rol fundamental en el sistema de frenado, dado que son el elemento que entra en contacto con el disco de freno. Al pisar el pedal, las cuatro pinzas cierran las pastillas haciendo presión contra el disco en movimiento, forzando así la fricción necesaria para reducir la velocidad o detener por completo el vehículo. Por esta razón, deben estar siempre en buen estado.
Unas pastillas de freno en mal estado suponen un peligro para la conducción al aumentar la distancia de frenado de forma proporcional a su desgaste. Recuerda que la distancia de frenado corresponde al trayecto recorrido desde el instante en que se pisa el pedal y el momento en el que el vehículo se detiene por completo.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]¿POR QUÉ NECESITO CAMBIARLAS?
El hecho de que desempeñen un papel fundamental en materia de seguridad es razón más que suficiente para remplazar las viejas pastillas de freno por unas nuevas. En su accionar, las pastillas entran en contacto con el disco de freno y la fricción producida en cada frenada las lima, de forma que con el tiempo pierden eficacia.
El grado de desgaste de las pastillas depende en gran medida del tipo de conducción. Si es más deportiva, con aceleraciones y frenadas bruscas, las pastillas se gastarán más rápido que si se conduce de forma progresiva y suave. Es necesario sustituirlas regularmente o en cuanto se detecte cierto grado de desgaste (según la mayoría de los fabricantes, el grosor mínimo aceptable es de 2 mm).[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text]Si la superficie de contacto de las pastillas es menos gruesa de lo recomendado, puede provocar un daño prematuro de los discos de freno.
Se estima que la mayor parte de averías relacionadas con los discos son causadas por las frenadas reiteradas con unas pastillas en mal estado.
¿CADA CUÁNTO DEBEN SER CAMBIADAS?
Debido al desgaste continúo al que son sometidas, la mayoría de los fabricantes recomiendan cambiar las pastillas de freno cada 10.000 km.
No obstante, ante la menor sospecha de deterioro, es necesario revisar su estado mediante la comprobación del testigo de desgaste.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]